Selección y Preparación de Alambrones: El proceso comienza con la selección de alambrones de acero de alta calidad, que son lingotes de acero de sección circular o cuadrada de diámetro relativamente grande. Estos alambrones se someten a un proceso de limpieza para eliminar cualquier contaminación superficial.
Calibrado y Recocido: Los alambrones se calientan en un horno para ablandar el material y facilitar el proceso de trefilado. Luego, se someten a un proceso de calibrado para ajustar su diámetro a las especificaciones requeridas. Posteriormente, se realiza un recocido para mejorar la maleabilidad del material.
Trefilado: Los alambres calibrados y recocidos se introducen en una máquina trefiladora, donde se pasan a través de una serie de dados o matrices con agujeros de diámetros progresivamente más pequeños. Este proceso de trefilado estira el material y reduce su diámetro mientras se mejora su calidad superficial y mecánica.
Enderezado y Corte: Las barras trefiladas resultantes se someten a procesos de enderezado y corte para obtener longitudes y dimensiones específicas según las necesidades del cliente. Este paso final garantiza que las barras trefiladas cumplan con los estándares de calidad y tolerancias requeridas.
Inspección de Calidad: Antes de su embalaje y envío, las barras trefiladas se someten a una rigurosa inspección de calidad para garantizar que cumplan con los requisitos de resistencia, dimensiones y acabado superficial especificados.